domingo, 18 de diciembre de 2011

EMBARAZOS DIFICILES FAMOSOS

Ante estos embarazos 

¿Que recomendaría usted?
Caso #1. El padre es asmático, la madre tuberculosa. Tienen cuatro Hijos. El primero es ciego, el segundo es sordo, el tercero murió y el cuarto tiene tuberculosis. La madre esta embarazada de nuevo.
¿Justificarías el aborto en esta situación?

Caso #2. Un hombre blanco viola a una niña negra de 13 años y esta queda embarazada.
Si fueras el padre de esta joven. ¿Le recomendarías el aborto?

Caso #3. Una señora esta embarazada; ya tiene muchos hijos, dos de ellos han muerto, su esposo se ha ido a la guerra y a ella le queda poco tiempo de vida.
¿Le animarías a que aborte?

Caso #4. Un ministro y su esposa han quedado en la miseria, ya tienen 14 hijos. 
Considerando su necesidad. ¿Está bien abortar el decimoquinto hijo que viene en camino?

Caso #5. Un médico le insiste a una campesina a que aborte porque de lo contrario ella corre grave peligro de muerte.
¿Recomendarías que acepte la recomendación médica? 

Caso #6. Una joven soltera está embarazada; su esposo no lo sabe porque no es el padre natural del niño.
¿Abortarías?

¡Todos estos casos son de la vida real! 
Veamos que ocurrió con esos bebés gracias a que sus madres no abortaron:
1. En el primer caso hubieras matado al compositor Beethoven.
2. En la segunda situación hubieras sido (el o la) responsable de asesinar a Ethel Walters, una de las cantantes negras mas famosas de Estados Unidos.
3. En el tercer caso hubieras matado al Papa Juan Pablo II.
4. En la cuarta situación hubieras aniquilado a Juan Wesley, famoso predicador del siglo pasado.
5. En el quinto caso hubieras abortado al gran pastor de almas, monseñor Agustín Román, obispo auxiliar de Miami.
6. En el quinto caso hubieses asesinado a  .................... ¡JESUCRISTO.
Pero hay que decir mas.  Aunque esos bebés jamás hubiesen llegado a ser famosos, aunque hayan vivido toda la vida enfermos, aunque nadie los hubiera amado. Cada uno seguiría siendo amadísimo de Dios. Sus vidas seguirían siendo igualmente sagradas. Nadie tiene el derecho de matar.  Los casos mencionados son muy tentadores a llevarnos a optar por la salida fácil de la muerte. La solución es amar aunque cueste. Pro vida no se limita a condenar el aborto. Debemos de ayudar a los que se encuentran en situaciones difíciles. 
San José y la Virgen tocan a nuestra puerta. ¿Le dirigimos al centro de abortos para resolver el "problema"?

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