sábado, 11 de octubre de 2014

Eficaz Metodo de Oración/ por El Padre Santiago Martín

1) JESÚS ME FÍO DE TÍ!

Orar es dialogar.
Lo primero que Jesús necesita oir de nosotros es que confíamos en El. El le gusta que se lo digamos.
Nosotros creemos en un Dios que puede ayudarnos o nuestra fe es enteramente intelectual?
La persona que acepta las enseñanzas de Dios, acepta también que El nos ama.
Nosotros debemos confiar en El siempre, pero más aun cuando pasamos por una crisis.
Confío
Creo
Me abandono en El.
Para decirlo en las horas de oscuridad, debemos decirlo en los suaves atardeceres de nuestras vidas


2) JESÚS TE QUIERO!

El segundo paso en la oración es decirlo que lo amo.Nosotros hemos olvidado que nuestra fe no debe ser intelectual solamente sino tener fe con el corazón. Esto se nos olvida.
Hay que decirle a Jesús: te quiero y decirlo mucho. Esto hace que crezca nuestro afecto por El. Va ligados a unos contenidos afectivos. Es decirle: Eres el primero pero no el único. El NO es celoso. El quiero que amemos a nuestros padres, hermanos, esposos, hijos, la patria. El le gusta estar acompañado en nuestro amor...Pero quiere ser el PRIMERO. Debemos amar pero no por encima de El. Amar no debe ser complicado. Dios es directo y simple. El no es complicado. 


3) JESÚS TE ADORO!

Primero está Dios. El es más importante que todo. Solo ante El doblamos las rodillas. Solo a El lo debemos adorar, pero nosotros no lo adoramos a El ,sino al trabajo, los bienes materiales, la familia, etc. Por ejemplo, si vamos a votar debemos votar por aquél que está a favor de las cosas de Dios. No debo votar por alguien que vaya en contra de los principios enseñados por la Iglesia...no al matrimonio gay, no al aborto, no a la eutanasia, etc.
Debemos analizar que estamos adorando.

4) ACCIÓN DE GRACIAS

Este es el corazón de nuestra espiritualidad. Primero debemos darle gracias por El mismo, por su Hijo, por la Iglesia, los Sacramentos y La Virgen María. Hay que darle gracias por SU existencia. Estas son cosas que siempre tenemos. No pasan. El amor de Dios no pasa. La salud, vida, trabajo pasan...no son permanentes. Por estas también debemos darle gracias obviamente. Si somos agradecidos y aprendemos a valorar los dones espirituales, construimos nuestra casa sobre roca.

Debemos entonces agradecer primero por lo espiritual y luego por lo material. De los dones materiales, hay que dar gracias primero que todo por la familia. Ninguna familia es perfecta pero hay que luchar por ella. Yo tampoco soy perfecto. Hay que dar gracias por todo aunque no sea perfecto! Nunca estamos satisfechos y siempre queremos más y/o mejor.
También hay que dar gracias por lo que tuvimos.

5) PEDIR PERDÓN

Hay que pedir perdón por el mal que he hecho, y el bien que he dejado de hacer. La falta de humildad a menudo no permite que yo vea mis faltas. Siempre creo que estoy en lo correcto. Hay que pedir a Dios que me muestre mis faltas y pecados.

6) TE PIDO GRACIAS

A Dios no le molesta que pidamos. "Pedid y se os dará."
A El le gusta que pidamos. No pedir es señal de soberbia. El problema es que pedimos cosas materiales y no espirituales. Debemos pedir ante todo SANTIDAD! Eso es más importante que pedir trabajo, salud, etc. Cuando pedimos esto último nada más, estamos siendo un mal ejemplo para nuestros hijos.

Pidamos cosas espirituales para nosotros y los nuestros. También debemos pedir por los sacerdotes y monjas y pedir por la santidad de ellos., por la paz, la patria, el fin del aborto,etc.

El otro problema es que exigimos, no pedimos. Y nos ponemos bravos con El cuando nos contesta que no. Cómo sabemos que nos ponemos bravos? Cuando reaccionamos enfadados cuando algo no nos sale, cuando lo amenazamos, cuando lo chantajeamos, cuando nos alejamos de El.

No podemos olvidarnos de dar gracias por los favores que SÍ nos concede.

Pidamos con humildad sin exigir...y demos gracias!

7) ME OFREZCO A TÍ, JESÚS!

Muchas veces se dice que orar es hablar a Dios, pero es también escuchar. Dialogo!

Si no escuchamos, no hay dialogo.
Me abro a TÍ! Ahora dime cuales son TUS necesidades, Señor. Te escucho.
Aunque soy muy poca cosa, que puedo hacer por Tí? Cuando hay silencio departe de Dios es grave porque no se fía de nosotros.

Poco a poco, vamos a escuchar Su voz. 
Debemos hacer un silencio interior para escucharlo.
Estemos abiertos al plan de Dios.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario