Queridos hermanos: Que en su trato mutuo la humildad esté siempre presente, pues Dios es enemigo de los soberbios, y en cambio, a los humildes les concede su gracia. Humíllense, pues, ante la mano poderosa de Dios, para que él los levante y encumbre en el momento oportuno. Pedro (5, 5-14)
Oración: Señor, la soberbia es la fuente de la mayoría de los pecados, sino todos. Me preocupa cuando soy soberbio porque esta no permite que vea mis errores y por el contrario, me hace creer que soy infalible, que siempre tengo la razón, y que aquellos que me rodean son los que están equivocados. Jesús, ábreme los ojos para reconocer que no soy perfecto, que muchas veces actuo con soberbia y EGOISMO. La verdadera conversión viene cuando dejo de pensar solo en mí, cuando dejo todo en Tus manos y me doy cuenta de mi pequeñez.
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