III Semana del Tiempo de Cuaresma
5 de marzo de 2016
El fariseo, de pie, oraba en su interior de esta manera: "¡Oh Dios! Te doy gracias porque no soy como los demás hombres, rapaces, injustos, adúlteros, ni tampoco como este publicano.
Ayuno dos veces por semana, doy el diezmo de todas mis ganancias."
En cambio el publicano, manteniéndose a distancia, no se atrevía ni a alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: "¡Oh Dios! ¡Ten compasión de mí, que soy pecador!"Lucas 18:9-14
Oración: Padre, qué gano yo apuntando el dedo a los pecados de aquellos que me rodean, cuando yo tengo tantos?
Ayuno dos veces por semana, doy el diezmo de todas mis ganancias."
En cambio el publicano, manteniéndose a distancia, no se atrevía ni a alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: "¡Oh Dios! ¡Ten compasión de mí, que soy pecador!"Lucas 18:9-14
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